CUADRÚPEDO Y CICLISTA
José F. Fernández Godoy
Resumen: a través de argumentos biomecánicos y antropológicos (temas centrales de la presente web) se ensalza el deporte de la bicicleta.
El cuadrúpedo
El cuadrúpedo, como obra arquitectónica, es perfecto. El cuerpo del animal (fig. 1), con predominio de la longitud sobre la anchura, lógicamente debe sustentarse sobre cuatro puntos. Y, así fue concebido por la Naturaleza: la columna vertebral (eje del cuerpo) asentada sobre los pilares de las extremidades. El equilibrio quedaba, pues, plenamente garantizado.
Fig. 1
La columna vertebral, en posición horizontal, está constituida de hueso esponjoso, de escasa resistencia a la compresión. Y las extremidades, pilares del edificio del cuadrúpedo (que soportan el peso del cuerpo), están constituidas por hueso compacto de gran resistencia a la compresión.
Y, desde el punto de vista de la motricidad, el cuadrúpedo es como un vehículo de tracción trasera, con el motor (representado por los potentes músculos de las patas de atrás) situado en la parte posterior del cuerpo.