De especial interés para los profesionales del parto.
Se denomina periné a la zona comprendida entre la vulva y el ano (fig. 1). Se trata de una formación peculiar de la especie humana. Los cuadrúpedos tienen la vulva junto al ano, careciendo, por tanto, de periné.
Fig. 1
Características físicas del periné
El periné es una estructura muscular y fibrosa, con dos propiedades físicas: elasticidad y resistencia.
Influencia del periné en el parto
En el apartado extensión y salida se estudia la incidencia del periné en la salida del feto.
En la figura 2 se observa como la fuerza de empuje se dirige directamente al periné. Así pues, el periné constituye una barrera que se opone a la salida del feto.
Fig. 2
¿Qué papel juega el periné en la biomecánica del parto?
El periné, en función de sus propiedades físicas (elasticidad y resistencia) origina una fuerza (F. perineal) opuesta a la fuerza de empuje (F. Empuje), proveniente de la contracción uterina y de la prensa abdominal. Y, como resultante de ambas fuerzas de sentido opuesto, surge la fuerza de salida (F. Salida) que impulsa al feto hacia la vulva.
Del papel que juega el periné en el parto interesa destacar dos consecuencias:
a) El periné supone un retraso en la salida del feto.
b) La cabeza del feto impulsada por la fuerza de empuje puede originar un desgarro del periné.
Las consecuencias señaladas anteriormente dependen de la modalidad del parto.
Parto en cuclillas
En el pasado remoto del parto natural (sin ayuda), la postura más generalizada de la parturienta era en cuclillas.
En la postura en cuclillas el tórax se desplaza hacia delante y, consecuentemente, el eje del feto gira en dirección de la flecha 1 de la fig.3. Así pues, la fuerza de empuje se dirige hacia el ano.
Fig. 3
A lo anteriormente expuesto se debe añadir que en la posición en cuclillas la presión de la prensa abdominal es muy intensa y, por tanto, también la fuerza de empuje.
Estos argumentos nos llevan a sospechar que en el parto primitivo en cuclillas (sin ayuda), el más favorable a la biomecánica del parto, se producirían desgarros perineales, que, frecuentemente, afectarían al esfínter del ano.
Parto espontaneo con protección perineal
La protección perineal consiste en presionar sobre el periné con una mano, con objeto de frenar la salida brusca del feto, conducir el occipital hacia la vulva y evitar, en lo posible, el desgarro.
La presión que ejerce la mano del asistente sobre periné supone una fuerza añadida a la fuerza perineal (F. Mano de la fig. 4).
Fig. 4
La protección perineal evita gran número de desgarros y colabora a que el periné cumpla la difícil misión de cambiar la dirección de salida de la cabeza del feto. No obstante, la protección perineal difícilmente puede evitar el desgarro de la horquilla vulvar (la zona más fina y, por tanto, más débil del periné).
Parto con anestesia epidural
La sistemática asistencial de parto en posición horizontal y con anestesia epidural lleva consigo una consecuencia fundamenta: la ausencia de la prensa abdominal y, por tanto, la considerable disminución de la fuerza de empuje. Y la disminución de la mencionada fuerza de empuje supone un retraso de la salida del feto.
El problema anteriormente señalado se suele solucionar con la práctica de la episiotomía (incisión del periné a partir de la horquilla vulvar). Con la episiotomía se salva el obstáculo del periné y se acelera la salida del feto.
Si, a la necesidad de la episiotomía, unimos las condiciones idóneas que proporciona el ambiente hospitalario para realizarla, fácilmente se comprenderá los altos porcentajes que su práctica está alcanzando en todo el mundo.
La polémica
La organización mundial de la salud (OMS) y los sectores sociales defensores de la naturalidad del parto denuncian la gran proliferación de las episiotomías e invitan a una disminución drástica de su práctica.
Desde mi larga experiencia como profesional del parto, desde mis estudios sobre la biomecánica del parto y desde mi posición como defensor de los intereses de la mujer en el parto, deseo entrar en la problemática del periné y la episiotomía con los siguientes argumentos:
1. El periné es un obstáculo peculiar del parto humano que debemos salvar de la mejor manera posible (en beneficio del hijo y de la madre).
2. Para conseguir una disminución del número de episiotomías es absolutamente necesario cambiar los sistemas asistenciales actuales, a todas luces, defectuosos.
3. El sistema asistencial que permita a la parturienta desarrollar en toda su amplitud la prensa abdominal llevará consigo (por sí solo) la disminución del número de episiotomías.
4. En los tiempos actuales los profesionales del parto tenemos la responsabilidad de reparar siempre el periné, incluso los desgarros de la horquilla vulvar.
5. Se debe buscar un continuo perfeccionamiento de la técnica de la episiotomía para que su práctica resulte lo menos lesiva para la mujer.