B. NORMAS DIETÉTICAS

 En el embarazo se produce las siguientes circunstancias influyentes sobre la digestión:

1. Una disminución de la motilina (hormona estimulante de las contracciones peristálticas) y, consecuentemente, una disminución del peristaltismo intestinal.

2. Una compresión del útero sobre el estómago y el intestino (ver hernia de hiato).

3. Los efectos de la compresión dependen:

3.1. De la postura

  a)  Postura vertical

En la posición vertical, el útero comprime en menor medida el estómago y el intestino. Y, el sentido descendente del movimiento del bolo alimenticio es favorable a su deslizamiento.

La posición vertical, y, sobre todo, realizando un ejercicio suave (por ejemplo: andar) favorece la digestión.

b) Postura horizontal

En la posición horizontal, el útero comprime con mayor intensidad el intestino, y, sobre todo, el estómago. Y, el bolo alimenticio se desplaza más lentamente.

La posición horizontal dificulta seriamente la digestión

3.2. De la cantidad de alimento

La cantidad de alimento ingerido en cada toma tiene una marcada influencia en el problema de compresión del útero sobre el intestino y, fundamentalmente, sobre el estómago.

Lo anteriormente expuesto sirve de base para instaurar las siguientes  

Normas dietéticas

Una buena masticación

Se dice, y es cierto, que: "una buena digestión comienza por una buena masticación".

Una masticación sosegada, en la que se produzca la minuciosa trituración, mezcla e insalivación del alimento, es la primera condición para lograr una buena digestión.

Y la embarazada, sujeta a las dificultades anteriormente señaladas, tiene un motivo mayor para tener presente esta primera norma.

Cantidad moderada de alimento

La dieta debe ser distribuida en cinco tomas al día. Y, la cantidad de alimento en cada toma debe ser moderada. Esta norma, establecida por la generalidad de los dietistas, debe ser tenida en cuenta, de un modo especial, por la embarazada.

3ª Alimentación rica en fibras

Con el fin de compensar la disminución del peristaltismo intestinal propio del embarazo, la gestante debe ingerir una  alimentación rica en fibras.

  Aporte de líquidos

Aporte hídrico de 1,5 a 2 litros diarios.

Pero es muy importante advertir que, ante la presencia de edemas (hinchazones, fundamentalmente en los tobillos y pies, por retención hídrica en los tejidos) o hipertensión, la cantidad de líquido debe ser fijada por el tocólogo que vigila el embarazo.

La postura y el ejercicio durante la digestión

Ha quedado claro que la postura horizontal dificulta seriamente el deslizamiento, sobre todo en el primer tramo del tubo digestivo, del bolo alimenticio.

No obstante, en algunos sectores sociales y en algunos países, se han establecido costumbres contrarias a lo que acabo de exponer:

·         Cenar inmediatamente antes de acostarse.

·         La siesta.

·         Ver la televisión recostada en un sofá después de comer.

·         ......

Son costumbres que dificultan la digestión del ciudadano en general, y de un modo especial, de la embarazada.

Lo ideal es realizar la digestión moviéndose en posición vertical o, a lo sumo, sentada en una silla de respaldo recto.

Y, cenar temprano, para acostarse con la digestión hecha.

NOTA ACLARATORIA

La dieta nutricional de la embarazada, analizada desde un punto de vista amplio, está pendiente de ser expuesta en otro lugar.

En este capítulo me he limitado a exponer las pautas alimenticias encaminadas a facilitar la digestión.

 

 

 

 

 

 

 

 

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